Juan Manuel Bernal finaliza actualmente las grabaciones de la telenovela Vivir a destiempo

Juan Manuel Bernal es un actor que ha encontrado la satisfacción en el momento ideal en sus más de 26 años de trayectoria.

“Los personajes cada vez son más complejos y estoy en el momento y edad para abordarlos, porque se necesita madurez, me siento preparado y seguramente lo que viene va a ser interesante”.

Actualmente se encuentra finalizando las grabaciones de la telenovela Vivir a destiempo, con un personaje del cual ha aprendido a reflexionar.

“Me están poniendo a cuestionarme y volver a poner en tela de juicio mi moral y prejuicios, está padre porque me sacan de mi confort, te obligan a verte al espejo, tratar de conocerte y ser mejor persona”.

Espera el estreno de su papel protagónico en el filme Obediencia perfecta, que trata el tema de la pederastia.

“Es el personaje que más me ha costado, en el que siento que estuve al borde del abismo y le agradezco mucho el sacudidón, haberme puesto a temblar porque creo que soy ahora un actor más consciente, más precavido y más generoso. Un personaje así te cuestiona e implicó echarme un clavado a mí mismo y es fuerte».

Consideró que es afortunado y le gusta interpretar lo que le implica un reto y lo saca de la cotidianeidad. Por eso estrenará este año la película Cuatro Lunas, con Karina Gidi, donde a pesar que le llamaron para hacer otro papel él quiso el del padre (machista) de un niño que sufre de bullying por ser diferente.

También estará al lado de Arcelia Ramírez, no ha trabajado con ella desde 1995, dentro de la obra de teatro Veneno, dirigida por Hugo Arrevillaga con quien quería involucrarse: “Ten cuidado con lo que pides porque igual y se te cumple”.

Gracias a estos logros está emocionado por su reciente nominación en el Festival de Televisión de Monte-Carlo, donde ya había sido considerado hace dos años, ya que Capadocia ha sido uno de los proyectos de los que se siente más satisfecho.

[El Universal]