Para dar vida a Satánico Pandemonium en la serie «Del Crepúsculo al Amanecer» la actriz mexicana tuvo que subir de peso
Eiza González subió alrededor de seis kilos con la finalidad de lucir curvas más atractivas y prominentes para su papel de Santánico Pandemónium en la adaptación para televisión del filme de los 90 Del Crepúsculo al Amanecer, según reveló en entrevista telefónica con el diario Reforma.
«En la película ves el cuerpo de Salma y sí te intimida, por lo que querían en la producción que me viera mucho más latina y mucho más mujer», explicó.
Teniendo claro el objetivo, Eiza se dispuso a comer más: «Fue entonces cuando me puse a subir unos seis kilos, ya que debía verme real, y no dudé en entrarle a la comida. Ahora me siento mucho más mujer, pues ya me crecieron las pompas y las bubis».
Al ser cuestionada sobre lo más complicado de la realización de esta serie, la mexicana reveló que fue la emblemática escena del baile, aquella que catapultó a Salma Hayek a nivel internacional.
«Estaba nerviosa, no por la coreografía o por traer una serpiente conmigo, sino porque debía de bailar frente a hombres, lo cual no había hecho nunca. Pero en cuanto empecé a estar más segura con mi cuerpo y me empecé a sentir más sexy, fue que todo fluyó para la escena. Sí me ayudó subir de peso», declaró.
La protagonista de la telenovela «Amores verdaderos» habló también de la importancia que tuvo su trabajo en México para ser reconocida en Estados Unidos:
«Cuando llegué a mi agencia de representación, que maneja a actores como Al Pacino, pensé que ni sabían quién era, pero resulta que sí, estaban muy enterados de mi carrera, porque les interesa saber del talento mexicano. Pero aun así tienes que llegar aquí con una mentalidad de que no eres nadie y que hay que dar todo para que te escojan».
La también modelo tiene claro que su nombre tomó relevancia en el mercado de habla inglesa luego de su fugaz romance con el actor Liam Hemsworth, sin embargo, eso la tiene sin cuidado:
«No me puedo estar preocupando por lo que se diga de mí, cuando debo estar enfocada en estar a la altura de mis compañeros de escena y demostrar que aunque el inglés no es mi primer idioma, puedo dominarlo sin ningún problema».
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