Misión cumplida. En su primera temporada en Europa, Guillermo Ochoa logró el objetivo de evitar el descenso con el Ajaccio de Francia luego de que los “Osos” cerraron el torneo con una victoria 2-0 ante el Toulouse.

Ante la necesidad de conseguir una victoria como visitantes en el Stadium Municipal, los jugadores del Ajaccio encontraron en la banda derecha el punto débil de Toulouse. En dos ocasiones la marca falló por ese costado y fue suficiente para que los “Osos” lo aprovecharan las oportunidades y sentenciaran el rumbo del encuentro.

Fuerza, concentración, orden e ímpetu fueron las armas que mostró el Ajaccio en el último juego de la temporada, ese duelo que marcaba el final de una lucha de 38 jornadas por abandonar los puestos de descenso y el fantasma que persiguió al equipo francés hasta el último momento.

A los 20 minutos de juego, Fousseni Diawara desbordó por derecha y mandó un centro diagonal al que Johan Cavalli recibió al borde del área, controló y disparó de zurda para poner la pelota pegada al poste izquierdo del portero Ahamada.

El primer paso a la salvación estaba dado, el equipo de la Isla de Córcega logró ponerse al frente ante la mejor defensa del torneo, pues los TFC sólo habían recibido 32 goles antes de este partido.

Y fue en ese momento cuando la figura de Ochoa, factor en múltiples partidos de la temporada, volvió a aparecer. Al 26’ Moussa Sissoko encontró un mano a mano frente al portero mexicano que salió a toda velocidad con zancadas largas para evitar la oportunidad del rival. Cuando el delantero mandó su disparo, la humanidad de Ochoa ya estaba a un metro de distancia para impedir el empate.

Cuatro minutos después llegó el segundo gol y una vez más gracias a Cavalli. En una jugada que salió de los pies de Guillermo Ochoa, el arquero despejó hacia la zona derecha donde el atacante Eduardo peleó el balón y lo ganó.

El delantero desbordó y mandó un centro diagonal en lo que parecía una calca del primer tanto. Cavalli controló y ahora eligió el lado derecho del portero para colocar el balón y poner el 2-0.

Así transcurrió el encuentro donde los guerreros de Córcega mantuvieron la concentración y evitaron cualquier peligro que Toulouse pudiera generar. Cuando Clément Turpin, el árbitro central del encuentro, decretó el final, todo Ajaccio corrió a celebrar, incluido Ochoa que hasta el final inclinó la balanza a favor de su club.

Con 41 puntos, el equipo que dirige Olivier Pantaloni ascendió hasta el puesto 16 de la Ligue 1 y dejó a Caen, Dijon y Auxerre como los elegidos para bajar a la categoría Ligue 2. Ochoa cumplió su misión.

[MEDIOTIEMPO]