Un autogol descarrila a La Máquina

La mentada reacción de Cruz Azul no llegó. La Máquina fue a dar vergüenzas a Chiapas al hacerle la vida fácil a los Jaguares, tan fácil que hasta le ayudaron a ganar, al anotar un gol en propia puerta.

Merecida derrota de los Cementeros ante un Jaguares que hizo poco o nada para ganar, pero se llevó el triunfo, un triunfo que le da oxígeno puro, mientras que para los azules es casi seguro que saldrán de zona de Liguilla.

Luis Amaranto Perea, el líder de la zaga fue quien se equivocó, en una jugada de rutina quiso pasarse de talentoso para desviarle el balón lo suficiente a José de Jesús Corona, para que los chiapanecos se llevaran los tres puntos para llegar a 11, mientras que los capitalinos se quedaron en 14.

Guillermo Vázquez prometió que este juego sería el del despegue de La Máquina Cementera y la realidad es que mintió. Cruz Azul fue el de siempre, el que no ha dado el estirón.

Los Cementeros fueron los que dominaron, explotaron las bandas, pero todo quedó en buenos desbordes y malos centros que nunca llegaron a los delanteros. Jaguares salió a intentar, pero simplemente el equipo visitante no se lo permitió.

Ambos equipos no merecieron irse arriba en el marcador. Cierto, al inicio Aquino hizo volar a Édgar Hernández con un tiro cruzado, pero de inmediato Franco Arizala provocó que Corona con la pierna salvara su marco.

Más allá de eso, el primer tiempo pasó sin pena ni gloria.

Para la segunda parte, Jaguares le entregó el balón a Cruz Azul. La sola presencia de Christian Giménez replegó a los chiapanecos, pero El Chaco poco pudo cambiar la cara del equipo.

Los técnicos comenzaron a mover sus piezas y en ese preciso instante el líder de la zaga cementera, Amaranto Perea, pecó de soberbia y lo pagó al marcar un autogol.

No hubo reacción de Cruz Azul, no hubo reacción de Memo Vázquez, quien mintió. La Máquina no aceleró, es más, retrocedió y dejó muchas dudas para lo que resta de la Liga.

[El Universal]