García Aspe está en la tablita

Alberto García Aspe presencia el entrenamiento de losPumas. Está rodeado del cuerpo técnico, pero también de los fuertes  rumores que indican que su salida del club auriazul es inminente y se hará oficial tras el partido contra el Atlante.

Los jugadores universitarios salen en su defensa. Marco Antonio Palacios, como buen zaguero, asegura que el vicepresidente deportivo auriazul «ha hecho bien las cosas», pese a que el equipo está prácticamente eliminado de la Liguilla.

«Todos fuimos novatos en algo. Él [El Beto] está empezando,  tiene  nuestro apoyo, ha hecho bien las cosas», describe.

Mientras  El Pikolín da su discurso ante los medios de comunicación, Aspe, a lo lejos, habla y Antonio Torres Servín, entrenador interino felino, lo escucha con atención.

Palacios informa que el tono de la visita del directivo auriazul fue «normal, como siempre: de apoyo y nosotros también lo respaldamos».

El defensor sabe que El Beto lo va a calificar al final de la campaña para saber si continuará o no con la camiseta de Universidad. Marco reconoce que puede emigrar.

Avisa que García Aspe será evaluado, al igual que él, por «otros jefes que están más arriba»
Los cuestionamientos hacia Palacios comienzan a diluirse hasta que por fin culminan. El Piko defensa se va de la Cancha Dos de CU.

Alberto García Aspe al mismo tiempo termina su diálogo con lo que queda del cuerpo técnico de Pumas. El directivo, rodeado de rumores de su salida, se va del entrenamiento felino por la puerta de atrás.

[Central Deportiva]