Tito Vilanova ha respondido con contundencia a Pep Guardiola en la primera rueda de prensa de la pretemporada, que ha ofrecido en Sant Joan Despí junto al director deportivo barcelonista, Andoni Zubizarreta.

El entrenador azulgrana ha admitido que le dolieron las declaraciones del ya entrenador del Bayern y ha negado tener la sensación de que desde el club se haya utilizado su enfermedad para atacar al de Santpedor. Tito ha insistido en que Pep no le visitó cuando estuvo tratándose en Nueva York y que «no fue por mi culpa, yo necesitaba su apoyo y no vino a verme».

El técnico ha repasado muchos temas, ha deseado suerte a Thiago pero ha negado no haberle dado minutos y se ha mostrado feliz por el fichaje de Neymar, pero lo más contundente ha sido la respuesta a Guardiola, que sin duda habría preferido no tener que dar. Tito se ha presentado a la cita con la prensa con un discurso muy meditado. «Todo el año he intentado evitar temas personales, a la gente no le interesan esos temas. Pero Guardiola aludió a mí directamente y voy a decir lo que pienso. Creo que no estuvo acertado, y debo reconocer que me sorpendió», ha empezado Tito.

Niega a Guardiola

Ha sido muy contundente al asegurar que «no creo que nadie de la junta haya aprovechado mi enfermedad para atacarme. Estamos encantados con el apoyo de todo el mundo, nos han ayudado lo máximo posible, esta sensación la he tenido de todo el mundo del club, desde la directiva hasta la plantilla, el ‘staff’… hay gente que incluso ha cogido un avión para visitarme».

También ha entrado en detalles de sus contactos con Guardiola durante su estancia en Nueva York: «Con Pep nos vimos en una visita de dos días, pero después, cuando estuve dos meses de tratamiento, entonces no nos vimos y no fue por mi culpa«, ha dejado claro, contradiciendo la versión aportada la pasada semana por Guardiola. «Es mi amigo y necesitaba su apoyo, pero no vino a verme. Él actuó así, yo seguramente habría actuado de otra forma. Es un tema personal, no quiero hablar de ello, pero se ha referido a mí».

Insistido sobre el hecho de que Guardiola asegurase que él no había sido el culpable de que no se viesen, Tito a sido también muy claro: «Ya he dicho que no fue por mi culpa, el que estaba solo y necesitaba apoyo era yo», ha insistido. Abundando en el discurso de Sandro Rosell, Vilanova ha comentado que «toda esta división, todos estos ‘ismos’, a la gente no le interesan. Los egos no interesan, la gente quiere oír hablar de si Messi marca goles, de Neymar, de fútbol… lo demás nos hace más débiles. Ahora mismo somos más débiles que hace una semana».

Ha admitido también que en el Barça «ruido lo ha habido siempre, ya he dicho que no nos beneficia, pero lo que deberíamos intentar desde dentro es no fomentar esa división. La gente no quiere oír hablar de estas cosas, quiere oír hablar de fútbol». En cuanto a la posibilidad de que el origen del malestar de Guardiola con él esté en que Pep había pedido esperar unos días antes de anunciar el fichaje de Tito como entrenador y que Tito y el club no le concedieron ese deseo, explicación que se ha dado en algunos medios, Tito ha aclarado que «mi sensación es que él era el entrenador y hablé con él. Tengo la sensación de que es mi amigo, hemos vivido muchas cosas juntos y hablo con él. De ese día no vienen los problemas».

También ha dejado claro que para él entrenar al Barça compensa todo aquello a lo que tenga que renunciar: «Yo disfruto muchísimo siendo entrenador del Barça, no me ha hecho sufrir nunca».

[Mundo Deportivo]