La familia de Juan Manuel Márquez le da un “no” para que continúe su carrera. Su esposa e hijos son de la idea de que cuelgue los guantes. Consideran que su victoria por nocaut ante Manny Pacquiao en su cuarta afrenta es la mejor manera de ponerle fin a su brillante carrera. No obstante, El Dinamita les pide chance para más. En abril tomará la decisión final

“Hago labor de convencimiento con mi familia, de que sí puedo continuar, de que sí hay la oportunidad de hacer una o dos peleas; y los veo como que no quieren. Mi esposa me dice que ‘no y no’, y estoy queriendo convencerla, porque yo me siento bien”, confiesa Márquez, durante una visita altruista a la Casa Hogar Elisa Margarita.

Márquez, de 39 años, venció el diciembre pasado a Manny Pacquiao con una gran demostración de físico y boxeo. Esa sensación de plenitud lo induce a querer seguir en los encordados. No obstante, había platicado con su familia sobre la posibilidad de retirarse .

El capitalino se ha revalorizado en el mercado mundial, por lo que, una pelea más, podría representar la mejor bolsa de su trayectoria.

“Está la posibilidad de querer buscar mejores cosas para mí, para mi familia. Después de hablarlo sinceramente, luego te puede afectar la ambición de poder, querer ganar más ‘lana’, de poder ganar lo mejor, pero después puedes pagar muy caro las consecuencias. De no querer frenarnos cuando ahora es un momento muy indicado. Luego sale más caro el caldo que las albóndigas”, advierte.

Juan Manuel, el padre que en años recientes ya no se despega de su familia, rechazó ir a la pelea del estadounidense Timothy Bradley —su más fuerte opción de rival— ante el ruso Ruslan Provodnikov este sábado en California. Ya le había prometido a su familia ir a Acapulco de “puente”.

Tiempo que tendrá para platicar con sus hijos, quienes ya no quieren ver a su padre arriba del cuadrilátero.
El Dinamita aprovechará estos días para descansar en la playa y ganarse el “sí” de su amada familia.

[Central Deportiva]