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México. – La crisis humanitaria por la oleada de niños centroamericanos que viajan solos hacia Estados Unidos no es una emergencia solo centroamericana. Es también mexicana.De acuerdo con datos del gobierno estadunidense, de la Patrulla Fronteriza, del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y del Departamento de Seguridad Nacional (Homeland Security), en lo que va del año 46 mil 188 menores de edad han llegado a territorio de EU sin sus padres y han sido detenidos por la Border Patrol, de los cuales 11 mil 577 son mexicanos. Es decir, una cuarta parte, 25%.
El resto sí son centroamericanos: en porcentajes redondeados, sin décimas ni centésimas, 13 mil 282 son hondureños (28%), 11 mil 479 son guatemaltecos (24%) y 9 mil 850 son de El Salvador (21%).
Y aunque la crisis ha estallado este año en los medios de comunicación, así como en los pasillos políticos y gubernamentales de Washington DC, el Distrito Federal, Tegucigalpa, Guatemala y San Salvador, la realidad es que la emergencia no es nueva.
El año pasado también fue terrible para México: 13 mil 188 niños y adolescentes mexicanos cruzaron la frontera solos y luego fueron deportados al país. Un promedio de mil 99 por mes, alrededor de 36 por día.
Los países de Centroamérica también padecieron: en 2013 el número de niños centroamericanos detenidos fue de 20 mil 805. El total de mexicanos y centroamericanos fue de 33 mil 993. Por lo tanto, porcentualmente 2013 fue todavía peor para México: 38.8% de los niños y adolescentes detenidos solos en suelo estadunidense fueron mexicanos. Casi cuatro de cada diez.
De cualquier manera lo pasan mal los centroamericanos porque la marabunta humana de sus niños es incontenible, al igual que sus deportaciones: el Observatorio de Legislación y Política Migratoria de El Colegio de la Frontera Norte indica que el total de los menores centroamericanos detenidos en 2014 equivale a 45% de las deportaciones de menores hechas en los últimos cinco años. En 2009 fueron 3 mil 304 detenidos; en 2010 fueron 4 mil 444; en 2011 se trató de tres mil 933; en 2012 la cifra casi se triplicó con respecto al año anterior, con 10 mil 146 deportaciones; en 2013 se duplicó a 20 mil 805 menores detenidos, y para mayo de este año ya van 34 mil 611 menores.
Según explica el Colegio de la Frontera Norte, por ley los menores centroamericanos, después de ser detenidos por la Patrulla Fronteriza, son enviados, antes de 72 horas, con personal de la Oficina de Refugiados (ORR) de Estados Unidos, la cual tiene la responsabilidad de cuidar temporalmente a los menores de edad no acompañados y ayudarlos a encontrar a su familia.
En el caso de los menores mexicanos son entregados en la frontera al Instituto Nacional de Migración. Éste, a su vez, los traslada hacia refugios temporales del DIF mientras son contactados sus familiares y si se prolonga su estancia pernoctan en una red de albergues de migrantes destinados para menores de edad.
Todo esto es lo que creó que el 12 de mayo de pasado la ICE reconociera una situación de crisis y emitiera un nivel de contingencia y alerta de Nivel IV, el más alto para el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS). A partir de entonces, el DHS destina recursos a las oficinas en Texas, Arizona y California para atender a los menores.
Sin embargo, ante la incapacidad de atención de la ORR, el gobierno de Estados Unidos ha trasladado a grupos de niños a instalaciones improvisadas en esos mismos estados, en especial a sitios de índole militar.
En el caso de California, los niños centroamericanos fueron llevados muy lejos de la frontera, hasta la Base Naval Ventura que se ubica entre Santa Bárbara y Los Ángeles, a más de cuatro horas de carretera desde la línea fronteriza.
En el caso de México, el principal estado expulsor de niños sin compañía es Sonora, con 2,348. Le sigue Oaxaca con mil 227. En tercer sitio se ubica Tamaulipas, con mil 188. En cuarto lugar está Guerrero, con mil seis menores. En quinto sitio se ubica Guanajuato con 779 niños, de acuerdo al acopio de datos hecho por el Colegio de la Frontera Norte.
CUMBRE DE CENTROAMÉRICA
El canciller de Guatemala, Fernando Carrera, dijo ayer que la cumbre de presidentes de Centroamérica, prevista el próximo viernes en República Dominicana, abordará el drama de los niños emigrantes que viajan solos a Estados Unidos.
En conferencia de prensa, Carrera dijo que Guatemala, El Salvador y Honduras, que conforman el Triángulo Norte de Centroamérica, presentarán una posición común para elevarla a la cumbre del Sistema de Integración Centroamericano (SICA), como acordaron en la cita multilateral del pasado viernes en Guatemala.
[Milenio]
