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Si existiera un hashtag en las redes sociales para los delanteros de los Pumas, sería: #SufrimosComoElChicharito. Y es que Eduardo Herrera critica a su afición, porque asegura que así como los abuchean cuando no anotan, “son los primeros en celebrar los goles y las victorias”, tal y como sucede con Javier Hernández con los Red Devils y en el Tri.

“Es normal (que nos abucheen), cuando hay días así en los que tuve oportunidades y no las pude concretar (ante Morelia), pero bueno, sé que es normal, hay gente que reacciona así y son los primeros que celebran los goles cuando se dan. Cualquier delantero pasa por algo así, incluso El Chicharito estando en el Manchester, estando en la Selección recibe ese tipo de críticas, que es normal para un delantero y hay que saber manejarlas”, reprocha el atacante auriazul.

Herrera y Robin Ramírez salieron abucheados ante Monarcas, cuando fueron sustituidos, luego de que no pudieran vulnerar la meta de Federico Vilar. El ariete mexicano resalta que se ganó (1-0), pero asume que ni así tienen contenta a su tribuna.

¿Qué queda? ¿Pedir paciencia a sus seguidores? Lalo lo descarta tajante, hasta con tono de molestia.

“No les pedimos nada, estamos enfocados en nuestro trabajo, queremos que estén contentos, pero tampoco vamos convencer a uno por uno; habrá gente que por más que se gane, no salga contenta; entonces venimos a hacer nuestro trabajo y que vaya bien. El equipo se ha visto mucho mejor en las primeras jornadas, no hemos perdido y eso es lo importante”, rescata El Grande.

Los reproches que han surgido en el seno de la afición de Universidad tienen que ver con la falta de gol que ha mostrado el equipo del Pedregal en el torneo.

La cosecha anotadora felina en lo que val Clausura 2013 ha sido de seis goles en siete duelos. Es decir, los Pumas se ubican como una de las peores ofensivas del certamen, igualados con el Guadalajara.

Aún con la pobre cuota de media docena de goles, a los del Pedregal les ha alcanzado para estar en la lucha por los puestos de Liguilla. Actualmente se encuentran en el sitio nueve de la tabla.

El reflejo de la baja productividad ofensiva universitaria está en las estadísticas de sus delanteros estelares. Entre Herrera, Ramírez y Martín Bravo apenas suman dos anotaciones. Como las oportunidades las han tenido, los seguidores auriazules han explotado en su contra con rechiflas sonoras.

“Tienen su derecho a expresarse, pero muchas veces son los primeros en celebrar las victorias, cuando se dan los goles, entonces por ahí debe haber más ecuanimidad, también por el hecho de que somos seres humanos, hay veces que acertamos, que fallamos, es normal y hay que saber asimilarlo”, concede el camiseta 15 de Universidad.

Como diagnóstico, Herrera achaca la mala racha de los artilleros en el Pedregal a lo ansioso que se encuentran los Pumas por hacer bien las cosas y agradar a su tribuna.

“Ya se acumulaba esta presión de ganar conforme pasaban los partidos y todavía hay lapsos en el que, con ese ímpetu de querer ir al frente y hacer un buen partido, erramos muchos pases y debemos tener más cuidado, por la ansiedad que tenemos para hacer los goles”, lamenta.

Eso sí, El Grande sigue con el recelo de recibir las mismas críticas que El Chicharito. Lo abuchean, pero bien que le aplauden cuando anota, considera. Critica ese comportamiento de su afición y a la vez lo entiende como delantero que ha pasado por buenas y malas rachas, justo como también ha vivido Javier Hernández.

[Central Deportiva]